Dropcam, nacida en 2009, ofrece cámaras de vigilancia, parecida a la utilizada para monitorear a los bebés, utilizando Internet y un dispositivo móvil, en lugar de un monitor.
Saber qué pasa en casa cuando no estamos, es el valor que aporta la empresa recién adquirida por Google en 555 millones de dólares. La fusionaran con Nest, compañía que compró el año pasado en 3.200 millones de dólares.
El fundador y consejero delegado de Nest, Matt Rogers, destaca puntos en común: “Nacimos con la idea de ayudar a la gente a estar conectada con aquello que le importa. En muy poco tiempo hemos cambiado la forma en que se interactúa con la casa. Es natural que las dos empresas encajemos. Con Nest funcionaremos mejor”.
Dropcam recibió financiamiento por cinco millones de dólares, de los inversores iniciales de Facebook. Cautivados por su facilidad de instalación. Greg Duffy creador de Dropcam, a sus 24 años, tuvo la idea al ver cómo su padre sufría para configurar un sistema de video vigilancia que había comprado para la casa. Parece muy joven, aunque no tanto si se tiene en cuenta que entró a la universidad con tan solo 15 años. Cuando llevaba dos cursos creó su primera empresa de llamadas a través de Internet, lo que le sirvió para entrar a trabajar primero en Microsoft y después en IBM.
La empresa cuenta con 120 empleados y el total de inversión que ha recibido es de 48 millones de dólares. Google pagara más de 10 veces esa cantidad para comprarla.
Dropcam almacena 30 días, 720 horas, de vídeo. Las cámaras tienen precios comprendidos entre 149 y 199 dólares, según la definición seleccionada.
El próximo miércoles, en el comienzo de su conferencia anual, Google I/O, es muy probable que hagan anuncios relacionados con estas adquisiciones.